Mujeres Rurales: las Guardianas Invisibles de Nuestros Territorios

Publicado el 8 Abril, 2025

l

Marzo fue un mes de reivindicación y reflexión sobre las luchas feministas, por esto, como integrantes de la ONG Conciencia Sur, queremos poner en el centro a las mujeres que siempre han sido invisibilizadas: las mujeres rurales.

Chile, un país que fue eminentemente rural, transformado por la reforma agraria y la explotación extractivista propia de nuestra versión del capitalismo neoliberal, trasciende con historias que sostienen la vida y el territorio, a pesar de la precarización y la desigualdad.

Según la FAO, las mujeres rurales en Chile poseen solo el 29,9% de la tierra, lo que refleja una desigualdad estructural profunda, sin embargo, siguen siendo resilientes guardianas de semillas, cultivos y saberes tradicionales que resisten al extractivismo. Como nos comenta Caren Erte, campesina de Los Sauces, “la dedicación de las mujeres campesinas refleja las productivas cosechas que sostienen a las familias con comida orgánica y saludable“.

Por otro lado, la crisis climática, la fragmentación de los territorios y la presión de la industria forestal ha dejado a las mujeres rurales en una situación aún más vulnerable, profundizando la carga del trabajo doméstico y la exposición a condiciones laborales precarias, como trabajar como temporeras con bajos salarios y sin estabilidad, además de verse enfrentadas a desafíos como la escasez hídrica y el temor a los incendios forestales.

El testimonio de Claudia Saavedra de San Nicolás refleja la resistencia de estas mujeres: “Convencer a mi familia que una mujer sola puede construir una vida desde cero”, ilustrando la lucha por la autonomía y el liderazgo de las mujeres rurales.

Además, la exclusión de las mujeres rurales no solo es económica, sino también política. A pesar de que son las principales responsables del abastecimiento hídrico y del riego de cultivos a pequeña escala, su voz sigue estando marginada en las decisiones relevantes. Las políticas públicas deben integrar sus saberes y garantizar su acceso a derechos fundamentales como la propiedad de la tierra, la seguridad hídrica y la participación en la vida pública.

Jenny Aguilera de Nacimiento afirma que “el mayor legado que podemos dejar es la resiliencia y la educación ante los desafíos de la vida”. Este llamado debe ser atendido urgentemente. La lucha de las mujeres rurales no es solo una cuestión de género, sino de justicia social y ambiental. Como Carolina Salazar de Nacimiento menciona, “ser mujeres empoderadas nos da miles de opciones para salir adelante, a pesar de las dificultades y las desigualdades”.

A lo largo de los años, las mujeres campesinas e indígenas han sido esenciales para sostener los ecosistemas, defender territorios y promover la biodiversidad, tanto cultivada como silvestre. Luchadoras como Berta Cáceres, las hermanas Quintreman, Macarena Valdés, Julia Chuñil y las hermanas Ñankul representan el coraje y la resistencia de muchas mujeres rurales que, sin ser reconocidas, siguen defendiendo la tierra, el agua y las semillas frente al extractivismo.

Es fundamental reconocer su trabajo, incorporar sus saberes tradicionales y disminuir las brechas de género, sin idealizar la pobreza ni la desigualdad. La sociedad debe avanzar hacia la equidad, la igualdad y el equilibrio con los ecosistemas. El mundo no puede sostenerse sin las mujeres, y tanto en el campo como en la ciudad, debemos caminar hacia un futuro justo y sostenible.

Autor

La lucha de las mujeres rurales no es solo una cuestión de género, sino de justicia social y ambiental. Como Carolina Salazar de Nacimiento menciona, “ser mujeres empoderadas nos da miles de opciones para salir adelante, a pesar de las dificultades y las desigualdades”.
Luchadoras como Berta Cáceres, las hermanas Quintreman, Macarena Valdés, Julia Chuñil y las hermanas Ñankul representan el coraje y la resistencia de muchas mujeres rurales que, sin ser reconocidas, siguen defendiendo la tierra, el agua y las semillas frente al extractivismo.

Publicaciones Relacionadas